Reforma integral de vivienda en el casco histórico de Santiago de Compostela.
Gracias a una operación de vaciado espacial, se pasa de una distribución muy compartimentada en pequeñas estancias, a un espacio diáfano con mayor presencia de luz natural y conexión entre las diferentes zonas de la vivienda.
La línea de diseño se basa en un «minimalismo elegante»con paños blancos y acabados en madera. Además, aparecen elementos puntuales que se rescatan del camuflaje al que se sometían en la anterior vivienda y se ponen en valor dejándolos en hormigón visto de obra.
La componente energética es un punto principal en la formulación general. Tanto en su equipamento, como en la rehabilitación de elementos de la envolvente, se pretende la ganancia en confort térmico.
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